Lois Valsa Perspectiva de clase y perspectiva de género Revista Trasversales número 49, diciembre 2019 Otros textos del autor en Trasversales En torno a: Edouard Louis, Quién mató a mi padre, traducción del francés de Pablo Martín Sánchez, Salamandra, Barcelona, 2018. Varias autoras. Tranquilas. Historias para ir solas por la noche. Edición de María Folguera y Carmen G. de la Cueva. Ilustrado por Sara Herranz, Lumen. Barcelona, 2019. (...) Conocer
su obra creo que es muy pertinente y oportuno en estos
momentos de la irrupción de Vox en España, algo que se
veía venir y que al final se ha materializado en las
últimas elecciones por la incapacidad de los políticos
de la izquierda y la derecha para frenar su avance.
Por lo que Louis cree que "es necesario volver a
hablar de la lucha de clases y de una forma nueva;
haciéndola permeable a las luchas de género". Al
tiempo, piensa que también es muy necesario renovar la
conexión entre literatura y política para darle la
vuelta a la involución que se produjo a partir de los
años 70 contra lo que significaban escritores
intelectuales como Sartre o Simone de Beauvoir, Duras
o Genet. Entonces el compromiso desapareció de la
literatura y surgió una pose estética. Hay que sacudir
la conciencia dormida de la izquierda y los literatos
de salón perdidos en cuestiones estéticas, como
Houellebecq y compañía, señala. Lo normal es que los
escritores procedan de medios sociales donde no se
sufren estas penurias como perder un subsidio o te
obliguen a ser barrendero público a consecuencia de un
accidente laboral como le pasó a su padre. (...) Las
catorce escritoras abordan así en sus textos distintas
situaciones que viven miles de mujeres en una cultura
marcada por el peligro sexual para reivindicar el
derecho a caminar tranquilas en un medio que se ha
vuelto muy hostil para ellas. Y también para celebrar,
además de la amistad, incluso intergeneracional, entre
mujeres, la resistencia y la vida ante cualquier
situación que vivan. E incluso para poder recuperarse
de las situaciones dolorosas y de los traumas
consiguientes sobre todo negándose a permanecer
impasibles, con o sin miedo, en un mundo que, a
menudo, considera que ser mujer es el mayor de los
peligros. Por lo que, teniendo claro que para
enfrentarse a estos temas no llegaba el ensayo sino
que lo podía hacer mejor la literatura es por lo que
estos textos se mueven, autoficcionalmente, entre lo
literario y lo discursivo. Desde luego son textos
literarios y muy políticos, algunos de de ellos con
perspectivas de clase y de género, muy insertados y
muy atravesados por su tiempo. Porque, sin duda, para
enfrentarse a los miedos y violencias que se ceban con
las mujeres sobre todo pero no sólo, se necesitaba un
libro así que, además, lleva escribiéndose desde hace
tiempo con una intensa correspondencia entre ellas
desde aquellas primeras notas en las servilletas. |