La Universidad de Valencia, en su edificio histórico hoy centre cultura, ofrece hasta septiembre la posibilidad de visitar una exposición de lo que fue la lucha de los universitarios contra la dictadura.

La muestra es útil, positiva tanto para quienes protagonizamos algunos episodios de esa lucha, como, igualmente para los jóvenes y la ciudadanía, porque significa recuperar una parte de la memoria histórica, y porque el hilo conductor de los materiales expuestos, documentos, obra grafica y fotos, no es otro que el inacabado combate por las libertades.

El movimiento universitario se tuvo que enfrentar a la situación, nacido a finales de los años cincuenta, en todo el estado español, fue creciendo y evolucionando, al tiempo, que la universidad fue ampliándose o masificándose, creando sus instrumentos reivindicativos y creativos de nuevos contenidos culturales. En esos primeros tiempos, en el caso de nuestra universidad hubo un elemento específico, que fue incorporar como parte relevante la identidad y lengua propia, es decir la idea de un País Valencià” doblemente oprimido.

Testimonio de esa primera etapa, seria la aparición de la primera organización estudiantil antifranquista, la “Agrupació Democràtica d’ Estudiants Valencians”, desde la cual se iniciaría el derrumbe del Sindicato Español Universitario (SEU); igualmente, la la revista “Diàleg”, a la que seguiría “ Concret”, y, ya en 1962, hay que citar las acciones de solidaridad con los mineros en huelga de Asturias, tal y como en otras universidades se hizo. En otro nivel, ante los ataques del Régimen contra Joan Fuster, o las represalias ejercidas contra Vicent Ventura, por su participación en el llamado ”contubernio de Múnich”, habría actos de solidaridad y protesta.

El testigo del combate contra la dictadura iría pasando a las nuevas promociones, ya los últimos años de los sesenta, el movimiento se ensancha, en una universidad con muchos más estudiantes, y con la incorporación de muchas más mujeres en todos los ámbitos, incluida la lucha antifranquista. Fue el momento de la “capuchinada”, alusivo al encierro de delegaciones de todas las universidades del estado en Barcelona, con muchas detenciones , y de los sindicatos democráticos con la coordinación de todos estos en la CUDE.

La muestra exhibe muchos materiales de las experiencias de los primeros años setenta, ya que de esos momentos se han aportado más materiales, y muy en concreto, de dos golpes represivos muy fuertes que afectaron particularmente a los estudiantes organizados en torno al PCE. Fueron años de mayor significado político, no exente de polémicas, al disputarse el protagonismo y la hegemonía en la lucha. Tal vez esto último, con exceso, no obstante, el compromiso y la generosidad son hoy una lección.

Como epilogo de aquella lucha, la exposición nos muestra un conjunto de fotos de la primavera valenciana de 2012, cuando los estudiantes de los institutos se lanzaron a la calle y fueron considerados ”enemigos” por el gobierno valenciano que, como en otros tiempos, apelo a las cargas policiales.